sábado, 18 de octubre de 2025

El Tesoro Oculto en la Basura Electrónica: La Historia de Fundación Equidad

¿Sabías que los componentes de una computadora pueden tardan en degradarse de 10 a 300 años?

En los últimos 20 años la adopción tecnológica a nivel mundial ha crecido de forma vertiginosa, lo cual ha facilitado y beneficiado la vida de millones de personas. Pero este boom tecnológico viene acompañado de algo no tan bueno y sobre todo para el medio ambiente; los residuos tecnológicos.

              Los residuos tecnológicos no sólo representan un peligro para el ya comprometido y amenazado medio ambiente, sino que  son un desperdicio de posibles recursos para disminuir la enorme brecha digital que aún tenemos en regiones de Latinoamérica, donde todavía grandes cantidades de personas de todas las edades  no tienen acceso a  la informática. Esta inquietud más el colapso económico de la Argentina en el año 2001, impulsó a María Eugenia Estenssoro y Haroldo Grisanti, a llevar a cabo una revolución digital, con el firme propósito de “libertad” y “equidad” para todos los argentinos, mediante el acceso a herramientas digitales para que cada persona pueda alcanzar sus sueños.

              Así nació la “Fundación Compañía Social Equidad” con la premisa de que “Creemos que la informática y, sobre todo, Internet, son el símbolo de la justicia social, porque te permiten acceder a muchas otras cosas”.  En los primero años la Fundación se centró en reducir la brecha con los Centros Digitales Comunitarios, ofreciendo alfabetización digital  y acceso a Internet, pero fue hasta que en el 2004 cuando ocurrió el punto de inflexión, la puesta  en marcha del “Taller”, lo que empezó a modelar y cambiar para siempre el rumbo de la Organización. El Taller, es la unidad de la Fundación que se encarga de reparar, reacondicionar y preparar los equipos informáticos (computadores, teclados, monitores, mouses, router, entre otros) que han sido donados para luego ser enviados a escuelas públicas, hospitales públicos y organizaciones sociales en todo el país.

              A partir de ese hito, la Fundación se dedicó a generar vínculos e incentivar a las empresas privadas a ser socialmente responsables y particulares que quieran a aportar donando hardware u otros componentes informáticos que tengan a disposición, así como desarrollando y expandiendo las funciones del Taller.

              En años más recientes, se le ha unido al Taller un compañero perfecto, que complementa su actividad, así como proporciona mano de obra para las tareas del mismo. La escuela de  capacitación técnica, ofrecer a  personas  que no tienen acceso directo a la informática programas formativos y prácticos, para así promover la inversión e inclusión laboral y social de estos individuos, en un campo con mucha demanda y en constante crecimiento. Adicionalmente, la escuela diseña y prepara propuestas educativas-tecnológicas para escuela públicas de toda la Argentina, con el fin de promover la innovación  en la enseñanza.

              Ahora hablemos del enorme impacto en números de la Fundación:

·       Más de 36.000 computadoras donadas.

·       Más 600 empresas donantes.

·       Más de 5.400 instituciones beneficiadas.

·       Más de 15.000 alumnos capacitados.

·       Más de 3.500 alumnos capacitados en otras instituciones.

·       Más 1.700 toneladas de residuos electrónicos recibidos.

En adición, la Organización ha sumado algunos servicios para poder seguir sosteniéndose, entre los que destacan:

 - Campañas Internas de Recolección de Residuos Informáticos: enfocadas en empresas para promover conciencia ambiental entre empleados y hacerlo de manera efectiva.

- Acciones de Responsabilidad Social Empresarial: asesoramiento y acompañamiento en el proceso de RSE de las compañías que lo soliciten.

- Alquiler de PC reacondicionadas: a empresas.

- Voluntariado Corporativo: formación de agentes de cambio, mediante jornadas de trabajo voluntario en el Taller, así como la participación de una charla en economía circular.

              Finalmente,  vale la pena destacar como la Fundación se  anticipó a principios del siglo XXI lo que los desperdicios electrónicos podrían representar para el medio ambiente. Pero hoy más que nunca su labor es necesaria, ya que a la reciente cultura de lo “fast”  los residuos electrónicos se multiplican en algunos sitios, mientras que en otros, a penas la gente tiene electricidad, pero  con el compromiso de ONGS y empresas con RSE, esa enorme brecha cada día se puede hacer más corta y cada uno de nosotros podemos ayudar, ya que  la Fundación abre sus puertas a donaciones de personas particulares en su sede del barrio porteño de San Telmo, donde se encuentra el Taller, para ello les comparto la Web oficial donde podrán encontrar más información, acá abajo:

Web: https://www.equidad.org/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Network School: El Sueño Utópico del Tecno-Optimismo y el Génesis de la Sociedad Red

El Exilio Dorado en el Sudeste Asiático Imagina una isla en el sudeste asiático, con clima tropical, playas paradisíacas e instalaciones...